Del lunes 25 de noviembre al domingo 1 de diciembre se lleva adelante en Busan, República de Corea del Sur, la última ronda de negociaciones de cara al Tratado global de plásticos. Delegados de más de 170 países participan de la última reunión del Comité Internacional de Negociación (CIN-5), cuyo objetivo es establecer un instrumento internacional jurídicamente vinculante para acabar con la contaminación por plásticos.
Comenzó la última ronda de negociaciones del Tratado Global de Plásticos. Actualmente se producen en todo el mundo algo más de 400 millones de toneladas anuales de plástico. Si la tasa se mantiene, el uso del plástico podría llegar a multiplicarse por tres en 2060. Es por ello que representantes de 175 países se pusieron de acuerdo para luchar contra la contaminación por plásticos mediante la idea de crear un Tratado global de plásticos. El objetivo es lograr un acuerdo para finales del año 2024. Se busca reducir en un 75% los plásticos para 2040.
La importancia de este Tratado se debe a que la mayor parte de las emisiones de carbono de los plásticos proceden de los procesos de producción y de la extracción de los combustibles fósiles, utilizados para fabricar el 99% de los plásticos. El actual crecimiento previsto de la producción de plástico también amenaza la capacidad de la humanidad para limitar el calentamiento global a 1,5 grados centígrados, tal y como establece el Acuerdo de París.
Países clave. Entre los países que han defendido un tratado sólido se destacan los del Grupo Africano, el Grupo de Latinoamérica y el Caribe (GRULAC), Pequeños Estados Insulares en Desarrollo del Pacífico y Filipinas, quienes abogan por medidas firmes y concretas para enfrentar la crisis plástica.
Reclamos de la sociedad civil y marcha
Los grupos civiles coinciden en incluir normas vinculantes que no sólo limiten la producción de plástico, sino que también regulen el uso de sustancias químicas peligrosas que contaminan el ambiente y afectan la salud humana. Los plásticos exponen a las personas a más de 16.000 sustancias químicas, 4.200 de ellas clasificadas como peligrosas, según el informe PlastChem, que ofrece un enfoque científico para identificar y tratar las numerosas sustancias químicas preocupantes presentes en los plásticos actuales.
Dos días antes de que comience la negociación, al menos 1500 personas se manifestaron en Busan instando a los líderes gubernamentales a que elaboren un tratado de plásticos fuerte y sólido que aborde eficazmente las causas profundas de la crisis de la contaminación por plásticos mediante la reducción de la producción mundial de polímeros plásticos primarios.
La Marcha del Plástico de Busan, encabezada por el movimiento mundial Break Free from Plastic (BFFP) y los aliados coreanos de la coalición Uproot Plastics, contó con la participación de grupos indígenas, jóvenes, recolectores de residuos y líderes comunitarios. Hicieron hincapié en los vínculos entre la contaminación por plásticos, los derechos humanos y la justicia medioambiental.
“Los objetivos obligatorios de reducción de la producción de plástico son esenciales para combatir la triple crisis planetaria del cambio climático, la pérdida de biodiversidad y la contaminación tóxica”, afirmó Semee Rhee, de Break Free from Plastic. “No frenar la producción desenfrenada de polímeros plásticos primarios significaría permitir que la crisis de contaminación por plástico persista y perpetúe las injusticias sociales y medioambientales para las generaciones venideras.”
El lobby de la industria petroquímica
Las últimas negociaciones sufrieron la presión de países productores de petróleo como Irán, la Federación de Rusia y Arabia Saudita que buscan detener los avances.
El impacto de los plásticos en la salud
- De 8 a 11 millones de toneladas de desechos plásticos ingresan cada año a los espacios marinos y costeros.
- Estudios científicos recientes confirman que la probabilidad de sufrir males cardiovasculares se multiplica por 4 con la presencia de micro y nano plásticos en las arterias.
- La ciencia confirmó la presencia de partículas plásticas en la sangre, la leche materna, las heces, y se repiten estos hallazgos en el agua que tomamos y el aire que respiramos.
Ana Rocha, directora de Política Global de Plásticos en la Alianza Global para Alternativas a la Incineración (GAIA), destacó el impacto devastador que los plásticos tienen en el planeta, señalando que se producen más de 400 millones de toneladas de plásticos al año.
«Ahora no es el momento de sacrificar la ambición. No podemos someternos a la voluntad de una minoría de países que bloquean el progreso por su propio beneficio a corto plazo», enfatizó Rocha, quien también destacó la importancia de que los Pueblos Indígenas y los recicladores sean escuchados en estas negociaciones.
¿Cómo surgió el Tratado?
En marzo de 2022, Jefes de Estado, ministros de Medio Ambiente y otros representantes de 175 países respaldaron la resolución de Naciones Unidas de crearlo. El objetivo es mitigar por completo la contaminación por plásticos mundial.
Dentro de este proceso, se pactó la creación de un Comité Intergubernamental de Negociación (INC) para la elaboración del acuerdo, que se realizará a través de diferentes encuentros. Ya hubo encuentros en Uruguay, Francia, Kenia y Canadá.
Aún no hay comentarios, ¡añada su voz abajo!